El Día Mundial del Patrimonio Audiovisual es una conmemoración de la adopción, en 1980, por la 21ª Conferencia General, de la Recomendación para la Salvaguardia y la Conservación de las Imágenes en Movimiento. Este día brinda la ocasión de sensibilizar a la opinión pública sobre la necesidad de adoptar medidas urgentes y de reconocer la importancia de los documentos audiovisuales.
Los archivos audiovisuales nos cuentan historias sobre la vida de las personas y las culturas de todo el mundo. Representan un patrimonio inestimable y una afirmación de nuestra memoria colectiva, así como una valiosa fuente de conocimientos, ya que reflejan la diversidad cultural, social y lingüística de nuestras comunidades. Nos ayudan a crecer y a comprender el mundo que todos compartimos. Conservar este patrimonio y asegurar que permanezca accesible al público y a las generaciones futuras es un objetivo vital para todas las instituciones dedicadas a la memoria, así como para el público en general